Lo que
Mariposa me mostró durante su lectura y su visita a nuestra clase es que la
identidad puede ser un estado de mente en adicción a las características físicas
o geográficas. Habló de la diáspora, y la “diasporican,” y como se conecta con
su cultura propia, en ‘la isla de palmas,’ aunque creció en Nueva York. Ella
nos cantó, y nos cantó sus poemas- en
este caso, ella las transformó a canciones, y más importante, una manera de
conectar a su herencia por un espectáculo. Como ella dijo, la poesía es un
ejercicio en “writing her way into being.” Su experiencia, en tantas maneras,
es similar a la experiencia de Nelly Rosario, pero su aproximación de su
experiencia como una afrolatina es diferente- en ejecución y actitud. Un
enfoque de Mariposa es su pelo y el viaje a aceptación de no sino su pelo (que
fue relajado) pero su identidad en total. Creo que su pelo, aunque fue difícil por
sus razones propias, es una metonimia por la experiencia de las afrolatinas en
todo el mundo. Dijo Mariposa que espere que su poesía pueda comunicar a las
otras, y que su experiencia no sería solo para ella. Y por eso, escribe (y
recita) la experiencia afrolatina en los términos más relatables. Y aunque ella
habla a la comunidad afrolatina en total, es difícil escribir y crear con tanta
pasión y devoción a su identidad sin una medida de algo personal. Ella nos compartió
algunas experiencias y poemas tan personal, y creo que fue en el ‘calor del
momento-‘ sus palabras, si escribidas o improvisadas, vienen de una lucha interna,
una herencia profunda, el corazón de una afrolatina orgullosa.
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